Hace unos días se viralizó un video de Ángela Aguilar en el que la señalaron de “maleducada” y “arrogante”. La cantante estaba saliendo de un lugar y para su comodidad un adulto mayor le abrió la puerta, su padre, Pepe Aguilar, así como su hermano se encontraban caminando detrás de ella, el momento en el que le abren la puerta llamó la atención de los cibernautas pues nunca da las gracias.
Después de las especulaciones, la artista decidió hablar del tema cuando se le preguntó en una entrevista qué había sucedido en aquella ocasión. Arturo Buenrostro, quien tiene su canal de YouTube Cheleando con Las Estrellas, aprovechó los cuestionamientos que le estaba haciendo para preguntar su opinión sobre lo que decían de ella a raíz del video.
“Por ahí vimos un video en el que les abrió la puerta un viejito”, expresó el entrevistador. Ángela efusiva le preguntó si quería saber quién era. “Yo conozco a ese viejito desde los 2 años de edad, se llama Tito. Él ha sido el chofer de la familia Aguilar toda la vida”, relata la cantante quien explica que desde muy pequeña Tito se encargó de su seguridad. “Tito me llevaba al doctor, a la escuela, al aeropuerto, a los shows”.
En esta entrevista recalcó que esta persona “es su familia más cercana”. Según explicó estaba concentrada en no caerse, razón por la que el video muestra algo que no es. “El perro me estaba jalando y yo traía unos tacones de este tamaño (grandes) que mi papá me dijo que no me pusiera y yo estaba enfocada en no caerme y todo mundo dice que no salude a Tito”, mencionó.
La intérprete de Dime cómo quieres manifestó su molestia por las acusaciones que se hicieron en su contra pues del sitio donde estaba saliendo arribó gracias a que Tito la llevó. “Tito fue el que me llevó al evento, y Tito fue el que me recogió en mi casa y de verdad yo sé cómo se vio pero nada que ver”, agregó.
Finalmente añadió que llegó a dos conclusiones: “El perro me está llevando a mi; en ese lugar entendí que hay que hacerle caso a tus papás y no ponerte tacones tan altos, la otra cosa es que al Gordo lo tengo que entrar cargando y la otra cosa, no hagas cosas buenas que parezcan malas, yo le tengo un millón de apreciaciones a ese señor, me ha cuidado toda la vida, gracias a él llego sana y salva a mi casa”.