A lo largo de su extensa carrera como presentadora de televisión, la abogada cubana Ana María Polo (63) ha mantenido en completo hermetismo su vida personal. Aunque por regla evita abordar temas familiares en sus entrevistas, la famosa jueza ha compartido algunos detalles de su hijo Peter Polo, joven al que la personalidad televisiva adoptó y que se convirtió en su única descendencia.
La antigua conductora de Caso Cerrado, extinto programa emitido entre 2001 y 2019 basado en la resolución de conflictos personales, es conocida por mantener en reserva cualquier detalle de su relación familiar, sin embargo, en 2016 mientras conversaba con el programa Suelta la sopa, Polo reveló que se convirtió en madre después de una triste historia.
Al ser consultada si es que tenía interés en convertirse en madre, la abogada reveló que ese era un tema superado. “Crié a un muchacho que hoy tiene 36 años, está casado, está feliz, nos hablamos”, dijo sobre el hombre que hoy tiene alrededor de 42 años.
La doctora Polo conoció al joven luego de atravesar un difícil momento personal. Tras casarse con el que califica como el amor de su vida, sufrió la pérdida de un embarazo producto de un aborto espontáneo.
Tras separarse, la abogada conoció a un niño llamado Peter que luego crió como un verdadero hijo. “Mi contribución a su vida fue bonita. Lo considero un hijo y él a mí una madre”, relató Ana María Polo, sin entrar en detalles sobre el hombre que estudió Negocios Internacionales y mantiene una exitosa carrera alejado de los reflectores.
A pesar de no compartir imágenes con su hijo, la doctora Polo se convirtió en abuela y ella no resiste compartir fotos con su nieta. La niña llamada Cossete, hija de Peter, protagoniza constantes publicaciones de la abogada en su cuenta de Instagram. A través de sus redes sociales, la ex conductora de televisión confesó que hay pocas cosas que disfrute más que compartir su tiempo libre junto a la niña.