Pocas personas saben lo que es crecer con la fama de Hollywood desde muy temprana edad, por lo que son pocos los que logran salir airosos para contar esa situación siendo adultos. Drew Barrymore (47) es una de las actrices con una de las carreras más dilatadas, quien inició con apenas seis años consiguiendo éxito con su papel de Gertie en la película E.T. (1982), pero que dio pie a que su infancia fuese de lo más complicada.
A través de su podcast, Drew's News, la actriz habló sobre dicho tema luego de que su invitado, el también actor Rob Lowe (58), confesara algunos detalles de la infancia de varios niños. Fue entonces que Drew comentó el hecho de que sus padres le permitieran consumir drogas siendo una niña, pero no alimentos azucarados.
“Mi madre no me dejaba consumir azúcar. Studio 54, la marihuana y el alcohol estaban bien, pero no podía tocar el azúcar”, contó la famosa actriz de Los Ángeles de Charlie. Según Barrymoe, que su madre le prohibiera consumir azúcar no hizo, sino que ella deseara comerlo más: “Escondía chocolate en el armario. Todos los demás vicios eran conocidos, pero el azúcar era algo que ocultaba. De verdad, escondía una caja en el armario”, reveló.
Sin embargo, no es la primera vez que la también productora estadounidense cuenta cómo fue su atípico pasado, pues hace unos meses contó lo terrible que fue para ella vivir esas situaciones con sus padres. “Tenía problemas y demasiados recursos. Iba a clubes y no a la escuela y robaba el coche de mi madre y estaba fuera de control”, relató Drew en el programa The Howard Stern Show de SiriusXM.
Sin duda alguna fue una situación muy complicada que le llevó a probar la marihuana con nueve años, la cocaína con 12, abusar del alcohol e incluso pensar en quitarse la vida tiempo después. A los 13 años, su madre la ingresó al centro de salud mental Van Nuys Psychiatric durante más de un año: “No podías perder el tiempo allí. Si lo hacías, te arrojaban a la habitación acolchada o te ponían en una camilla y te ataban”, explicó la actriz en la misma entrevista. Afortunadamente, Drew logró superar todas sus adicciones y se convirtió en una de las mejores actrices de la industria.