La casa de papel tuvo gran impacto en el mundo cuando fue estrenada por Netflix en 2017, su creador Álex Pina logró capturar durante cinco temporadas el relato de un grupo de ladrones que tenían el objetivo de sustraer efectivo de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, esto de la mano de sus protagonistas de nacionalidad española, que con su característico acento e increíble actuación, lograron atraer la atención de los televidentes.
Cinco años después, la producción volvió pero con detalles distintos: una historia contada desde otra perspectiva, máscaras diferentes y un equipo de actores y actrices provenientes de Corea del Sur, quienes aprovecharon el auge de las series hechas en este país para lograr un remake que hasta el momento sigue colocándose entre los más vistos.
En la versión original el equipo que cometió el atraco se encuentra en España y en esta nueva historia indexan el sueño los surcoreanos y los norcoreanos: Una Corea unificada. Los ladrones intentan robar la Casa de la Moneda, que como sucede en la serie española, lo hacen con trajes rojos que acompañan con una máscara de Dalí, pero los coreanos le dieron un especial significado cultural.
El significado cultural de las máscaras los personajes de La casa de papel: Corea
En Corea del Sur se lleva a cabo la ceremonia del Juego de las máscaras de Byeolsingut, en la que se realiza un tipo de ritual con máscaras tradicionales llamadas Hahoetal, en total son 12 y se distinguen por nombres (además de sus características únicas): Gaksi, Jung, Yangban, Choraengi, Seonbi, Imae, Bune, Baekjung, Halmi, Ttoktari, Pyolchae y Chongkak (las últimas tres están perdidas)
Este espectáculo es tipo teatral y se considera como uno de los más antiguos en los que representan momentos de la sociedad coreana en la época del reino Goryeo, cuando la población se burlaba, mediante esta obra, de la clase alta. Cada una de las máscaras de madera representa a un personaje y la que se usó para La casa de papel: Corea da vida al más poderoso, el aristócrata: Yangban.
“Las 12 máscaras de Hahoetal”, como también se les conoce, fueron nombradas Tesoro Nacional y además de realizar este ritual que atraía a los de la clase baja ayudaba a ahuyentar a los malos espíritus con el objetivo de llevar prosperidad a la aldea (esta danza se originó en la aldea de Hahoe, Andong).
En total se realizaban 10 actos, cada uno con una temática diferente en la que mostraban diferentes situaciones de la sociedad a través de estas máscaras y sus personajes. El carnicero (Baekjung), La anciana (Halmi), El anciano (Ttoktari), El funcionario (Pyolchae), El soltero (Chongkak), El maestro (Seonbi), El erudito (Imae), La concubina (Bune), Choraengi Sirviente del aristócrata (Choraengi), El budista (Jung) y La novia (Gaksi).