Detrás del cuerpo perfecto de Gala Montes (22) se escondía una mujer víctima de los estereotipos que la sociedad impone y que muchas mujeres, sobre todo las que aparecen en la televisión, deben de seguir si quieren ser bien vistas, no solo por el público, sino por los productores de grandes proyectos.
La estrella que dio vida a Luza, la hija de Aureliano Casillas en El señor de los cielos contó que su vida no siempre ha sido de color rosa, como millones de personas creen, y que vivió momentos muy obscuros en soledad, así como en secreto para no afectar su trabajo en la producción de la telenovela Diseñando tu amor.
Después de darse cuenta del daño físico y emocional que se provocó, la estrella se sinceró sobre cómo llegó a lastimarse en busca del cuerpo perfecto: "vivimos en una sociedad que aplaude que pierdas peso sin importar el trastorno alimenticio que desarrolles en el camino. Lo único que podía hacer en esos momentos era pensar en comida todo el maldito tiempo. Le preguntaba a la gente qué había comido porque fantaseaba con comer azúcar, carbohidratos…"
La actriz contó que su obsesión por verse bien y gustarle a otros, aunque ella se sintiera mal, llegó a tal grado que se sentía culpable cada vez que consumía un alimento que estaba fuera de su dieta, así fueran muy pequeño, además, constantemente se torturaba frente al espejo y se hacía creer que todo lo que comía deformaba su cuerpo.
"Me quedé con una trauma bien gacho, me lastimé, pasé sobre mí, lastimé mi metabolismo, recuperé el peso que tenía y más, todo por querer sentirme aceptada y amada, cuando la aceptación no vine de ahí", contó severamente molesta por el daño que se hizo. Gala Montes en este momento se ama y acepta como es, razón por la que se anima a decirle a la sociedad que no está bien tener un cuerpo pequeño y que le da miedo todo lo que se difunde en redes sociales y lo que algunas colegas llegan a aconsejar a otras.