Hace exactamente una década, Taylor Swift (32) viajó a Londres para participar de un casting al que había sido invitada por el director de la película musical Les Misérables. En la audición había dos roles, el de Éponine y Cosette, que aún no habían sido llenados, y la cantante estadounidense vio una posibilidad de acrecentar su experiencia artística.
"Hice algunas audiciones y me fui a Nueva York. Tenía más la apariencia de Cosette y el rango vocal de Éponine, así que se estableció que la decisión quedara pendiente por un tiempo. Al final, no iba a conseguir el papel", agregó Swift mientras contaba su anécdota en The Graham Norton Show que emite la señal BBC 1. (ver abajo video del momento)
Aunque las posibilidades de que obtuviera algún papel eran menores, el director de la película, Tom Hooper, insistió con la cantante. Le ofrecieron que hiciera una audición con Eddie Redmayne, quien ya estaba confirmado como el galán de Éponine y Cosette. Swift no lo pensó mucho: quería estar en la película, pero además el actor en cuestión es uno de su favoritos.
"Era una experiencia que quería tener en mi vida, así que viajé a Londres". Hasta ahí todo bien, se cumplían parte de los deseos de Taylor Swift, quien igualmente sabía que las opciones de obtener el papel eran pocas.
Taylor Swift va a una audición de la que se avergüenza
Ya en Londres, Hooper le dijo que lo mejor es que probara con el papel de Éponine, cuyo aspecto es el un joven que vive en la calle en el siglo XIX. La conversión del personaje significaba un maquillaje oscuro debajo de los ojos y aplicarse un tinte marrón en los dientes.
Taylor Swift agradeció la nueva oportunidad, y preguntó si podría saludar o conocer a Redmayne antes de maquillarse. Pero ante su sorpresa, le dijeron que no, que no había tiempo y que el actor llegaría justo para hacer la escena de la audición.
En ese momento, la cantante recordó en The Graham Norton Show que la experiencia "se convirtió inmediatamente en una pesadilla para mí". Llegado el momento de saludar y hacer el casting, Swift relató que apenas abrió la boca, para ocultar el color marrón de su dentadura. Supo, en ese instante, que su historia en Les Misérables había llegado a su fin. (Los papeles finalmente se los otorgaron a Amanda Seyfried, el de Cosette, y Samantha Barks, el de Éponine).
Lo que no sabía Taylor Swift era que Eddie Redmayne también traía sus propios problemas. Antes de llegar a la audición, había pasado a comer pizza, y pidió una masas redondas de ajo, que le dejaron un hálito francamente intenso.
Redmayne, quien estaba también presente en The Graham Norton Show escuchando a Taylor Swift, recordó que "fue muy extraño porque Taylor estaba completamente vestida como Éponine, y yo estaba vestido con un buzo deportivo. Pensé que estaríamos cantándonos el uno al otro... Pero nos tenían en el piso cantándonos cosas dulces frente a frente, y todo lo que sabía es que tenía aliento a ajo", dijo.
"Estaba tratando de mostrar emoción y al mismo tiempo no castigarte", le confidenció el ganador del Óscar por La Teoría del Todo (2015) a Swift, entre medio de risas del público y las de ellos mismos.
El video de Taylor Swift y Eddie Redmayne contando el episodio