Durante la década de los 90, se vivió una gran época en la escena musical, ya que además del rock que estaba muy bien posicionado, surgieron figuras del pop que marcaron a toda una generación. Nombres como Fey (49) o Jeans sonaban en todas las estaciones de radio, así también como Lynda (40), quien se consolidó como una gran figura y después desapareció sin mayores explicaciones.
En 1996 fue que Lynda comenzó a sonar en todos lados con su icónica canción Gira que gira y. posteriormente. siguió cosechando éxito con melodías como Blue Jeans, A mil por hora y Maldita timidez.
Detrás de ella, se encontraba la persona que ayudó a que se consolidara como una estrella juvenil: el productor musical Carlos Lara (63), quien previamente había trabajado con Ricky Martin, Yuri, Flans, Timbiriche, entre otros, y que también era su cuñado, ya que estaba casado con su hermana Alissa.
Llegando los primeros años de este siglo, Lynda mostró una imagen más alternativa, con un look de rastas y con una posición rebelde. Poco antes de salir de escena, declaró que padeció durante muchos años desórdenes alimenticios y también aseguró que no iba a permitir ser el títere de Televisa.
En 2002 y tras sacar su último disco Polen, la también compositora desapareció sin dar ninguna explicación y haciendo que crecieran los rumores sobre los motivos que la llevaron a bajarse de los escenarios: que Lynda se enamoró de Carlos Lara pese a que es un hombre que casi le doblaba la edad y que era esposo de su hermana.
De acuerdo con los rumores que han circulado en redes sociales, Lynda y Carlos tuvieron un amorío mientras él seguía casado con Alissa, por lo que la familia de la artista se alejó de ella argumentando que fue una gran traición.
También existió la versión de que Lara le recomendó a la cantante que se alejara del medio del espectáculo para evitar señalamientos, sin embargo fue ella misma quien en 2018 salió a desmentir esa versión, presentó a su familia y confirmó que hizo una vida con quien era su cuñado y juntos tuvieron un hijo.
"Siempre existirá quien alimente su amargura, creando rumores sobre tu persona o incluso, lastimando tu dignidad o la de los tuyos. Tienes dos caminos, revolcarte en el lodo donde ellos viven, o continuar el camino que te lleva a casa. En mi caso, soy un ser humano feliz con días malos y sueños imposibles, pero nunca he sido cenicienta. Hay quienes confunden mi introversión con "falta de autoestima" pero quien realmente me conoce, sabe que soy una mujer fuerte e independiente al igual que mis ideas. Por eso, hoy te presento a mi familia, el microcosmos donde habito y donde soy un ser invencible e intocable. Para que cada vez que escuches rumores oscuros, recuerdes que mi historia, solo la cuento yo", escribió la cantante en su momento.
En 2018 Lynda regresó a los escenarios haciendo algunas presentaciones en el 90's pop tour, antes sus fans emocionados esperan que en algún momento retome su carrera musical.