Después de su descanso musical, Adele regresó al mundo de la música con grandes éxitos como Easy on me y Oh my God, temas que forman parte de su nuevo material discográfico. Desde entonces la presencia de británica ha sido contante y este martes volvió a llamar la atención del mundo al desfilar por la alfombra roja de los premios BRIT Awards con un vestido negro deslumbrante con el cual rápidamente acaparó las miradas de todos.
Esta prenda de tul, hecha por Armani, tiene toques de estilismo de Jamie Mizrahi, quien ha sido una de las principales cuidadoras de la imagen de la cantante británica en el nuevo álbum 30. Accesorios sencillos como los aretes en plateado y el clásico cat eye que combinó con un maquillaje sencillo, hicieron ver a la intérprete de Someone like you como una de las artistas más destacadas y elegantes de esta premiación.
La compositora no dejó de lado este estilo que ha portado durante su trayectoria en la que vestidos elegantes en colores neutros forman parte de su día a día. Esta vez optó por llevar el cabello suelto y como es costumbre sus uñas en forma de almendra también fueron las protagonistas. El negro nunca pasa de moda para Adele pero lo implementa en looks que se recuerdan año tras año.