Luego que se confirmara que los integrantes de la banda BTS tomarían una pausa de sus actividades para cumplir con su servicio militar obligatorio en Corea del Sur, ya hay uno de ellos que está ad portas de iniciar su proceso. Se trata de Kim Seok-jin (29), más conocido como Jin, el mayor de los miembros de la famosa agrupación del sello coreano Big Hit Entertainment.
Según informes de representantes de la industria, Jin ingresaría al centro de capacitación de reclutas en el condado de Yeoncheon de la provincia de Gyeonggi, ubicada en la ciudad de Suwon, el martes 13 de diciembre, y así adquirir su asignación oficial después de completar la capacitación básica.
Sin embargo, fue el mismo Jin quien explicó en un post de la plataforma para fans del K-pop “Weverse” lo comentando en los medios. El artista no desmintió la noticia y expresó que no pretendía hacer público su fecha de ingreso, ya que habría más hombres alistándose en el lugar u otros que acompañarían a sus seres queridos mientras realizan su alistamiento.
Jin solicita un favor especial para no correr peligro
"Se ha publicado una noticia que no pretendía hacer pública, pero mis ARMYs, no deberían venir al centro de entrenamiento", dijo Jin.
"Habrá muchas otras personas que vendrán a alistarse o a acompañar a sus seres queridos mientras se alistan, por lo que será agitado y podría llevar a situaciones potencialmente peligrosas. ARMYs, los quiero", concluyó el artista.
La agencia de entretenimiento Big Hit Entertainment, a cargo de BTS y las actividades de cada uno de los miembros, se pronunció al respecto a estos informes explicando que no saben con exactitud lo que sucede con el futuro de artista y su servicio militar: “Es difícil de confirmar. Pedimos su generosa comprensión”, señaló el sello.
Hay que recordar que en Corea del Sur el servicio militar es obligatorio y todos los hombres sanos tienen que cumplir y hacerlo por un periodo de 18 meses, antes de cumplir 28 años. Esta exigencia se vive de manera un poco diferentes para los artistas del K-pop, ya que en el país se aprobó en 2020 un proyecto de ley que permite aplazarlo hasta los 30 años.