Luego de la aparatosa caída que Alejandra Guzmán (54) sufrió durante su presentación en la gala de la Herencia Hispana en Washington, EE.UU., la cantante mexicana dio a conocer la prohibición que le hicieron sus médicos para lograr recuperarse de la dislocación de cadera que la mantuvo alejada de los escenarios.
La intérprete de Mala hierba conversó con el programa Ventaneando sobre el proceso de recuperación que enfrenta tras la lesión que sufrió durante su presentación en el Kennedy Center a fines de septiembre. “Realmente este fue un duelo con mi cuerpo”, partió relatando la hija de Silvia Pinal.
“Nunca me había fallado mi cuerpo y tengo que ser consciente de que tengo 54 años, de que no puedo bailar y saltar como antes, aunque no puedo controlar eso”, confesó la artista antes de revelar la prohibición que le hizo su equipo médico para alcanzar una completa recuperación.
“Olvídate de los tacones, porque ahorita es muy peligroso, uso unas botas gruesas y tengo unos zapatos especiales”, dijo Guzmán respecto a la negativa impuesta por sus médicos de utilizar calzado con altura, aunque no está confiada en poder cumplir el mandato. “Sé que no debo hacerlo, pero como buena coqueta mujer, quieres los más altos, quieres siempre estar sexy”, admitió.
La intérprete de Eternamente bella reveló que sintió miedo al sufrir la caída: “Sabía lo que estaba pasando, lo que pasaba es que no me podía mover, no me podía parar”, dijo la hija de Enrique Guzmán, antes de agregar que otra persona no hubiese podido enfrentar el accidente de la misma manera.
“Soy muy fuerte, me doy cuenta de que el umbral del dolor que tengo es impresionante, a pesar del dolor yo podía estar consciente, yo creo que otra persona se hubiera desmayado”, cerró la cantante que ya regresó a los escenarios con un concierto en Pachuca el pasado fin de semana.