Al final de cuentas, la historia será un trueque: al príncipe Andrés le darán Frogmore Cottage, la casa dentro de Windsor que le arrebataron al príncipe Harry y Meghan Markle, y a los duques de Sussex les entregarán las habitaciones que el duque de York tenía dentro del Palacio de Buckingham. Todo esto por orden expresa del Rey Carlos III para que su hijo menor y su nuera estén presentes en la coronación del 6 de mayo próximo.
Según informa Mail on Sunday, fuentes de la realeza informaron que el príncipe Harry y Meghan Markle siguen estando invitados a la coronación que se realizará en la Abadía de Westminster, pese al desalojo de la casa de Frogmore Cottage.
Los informantes del tabloide dijeron que el Rey Carlos III estaba "furioso y cansado" con las revelaciones de Harry en el libro Spare, especialmente por el trato que le dio a la reina consorte Camila, a quien llamó "la otra mujer" y la calificó de "malvada".
Agregaron que "el Rey no es un mal hombre. No desea ver a su hermano Andrés sin hogar o sin un centavo. Tampoco desea privar a los duques de Sussex de tener un lugar donde llegar en el Reino Unido".
Si bien Meghan y Harry no podrán llegar a la casa que les regaló la Reina Isabel II para su matrimonio dentro de los terrenos del castillo de Windsor, sí podrán hacerlo a uno de los edificios más emblemáticos de la capital británica.
"Londres encaja mejor. Los Sussex siempre han querido tener habitaciones en el Palacio de Buckingham. Podrían tener las antiguas habitaciones que el príncipe Andrés tenía allí y que actualmente están siendo desocupadas", agregaron las fuentes.