Una semana al año. Esa es la ocupación que le da la realeza británica a una de sus mayores joyas arquitectónicas. La Casa Real británica emplea esa mansión para su fiesta anual, que además se realiza en el jardín. La mansión es una de las reliquias que ha heredado el rey Carlos III y que tendrá que ver cómo ocupa a lo largo de la temporada. Si es que la ocupa...
La propiedad tiene una historia monumental. Ha albergado a figuras de altísimo rango y personajes de gran influencia, desde otros reyes europeos hasta el Papa Benedicto XVI o el ex mandatario sudafricano Nelson Mandela. Le pertenece a la realeza desde hace más de 500 años y está considerada oficialmente como la residencia en Escocia.
Pese a todo el historial, ha sido el palacio de Balmoral el que se llevó las preferencias de la reina Isabel II cuando visitaba el país que compone el Reino Unido, tanto así que fue el lugar donde dejó de existir en septiembre pasado.
Construido junto a las ruinas de la Abadía de Holyrood, de ahí su nombre, fue levantado como palacio gótico en cuatro años, bajo el reinado de Jacobo IV. La estructura se instaló alrededor de un terreno de 40 mil metros cuadrados, rodeada de grandes jardines; al interior tiene una capilla, una gran galería, varios salones de comedores y salas de reuniones, dejando para los pisos superiores los apartamentos privados de los integrantes de la realeza.
La reina Isabel II concurría al castillo de Holyrood en lo que se denomina "la semana de Escocia". La dignataria presidía una ceremonia de investidura a los ciudadanos escoceses elegidos, como también la Garden Party, a la que concurren alrededor de 8 mil invitados que se distribuyen en los jardines exteriores del palacio.
La pregunta que ahora se están haciendo los británicos es qué ocupación le dará el rey Carlos III a su castillo, más allá de la Garden Party que generalmente se desarrolla en junio. Si bien la mansión recibe visitas turísticas todo el año, salvo la semana en que alberga a la familia real, y también es ocupada para algunos eventos ligados al gobierno de Escocia, el debate es ¿qué se hace con una mansión de casi 300 habitaciones que pasa vacía casi todo el año?
Muchos no entienden por qué la Casa Real elige a Balmoral en lugar de Holyrood para pasar las vacaciones, y si ahora esa tradición que impuso la reina Isabel II será también heredada por su hijo. Hasta ahora Carlos III no se ha manifestado al respecto, y muy probablmente no es un tema que sea prioritario, teniendo en consideración que bastantes problemas tiene con la organización y agenda de su coronación en mayo próximo.
Por ahora, Holyroodhouse seguirá esperando que alguien ocupe sus habitaciones y que el estandarte del monarca británico que se pone cada vez que llega, en lugar de la bandera esocesa que se ve todo el resto del año, no solo esté vigente una semana al año.