El Príncipe Harry y Meghan Markle serán invitados a la coronación del Rey Carlos III y los organizadores tienen un detallado plan para conseguir que puedan asistir.
Los asesores de la realeza tienen como tarea lograr que la pareja esté en la ceremonia de coronación del 6 de mayo próximo en la Abadía de Westminster, pese a la incomodidad que podría generar el hecho debido a las revelaciones que han hecho los Sussex en los últimos meses a través del libro de memorias "Spare" y de la docuserie de Netflix "Harry & Meghan".
Según informó "The Sun", los funcionarios que trabajan en los planes de coronación confirmaron que el Palacio de Buckingham en ningún momento sugirió que la pareja fuera excluida del evento de tres días para coronar al nuevo Rey.
Las invitaciones para el servicio de 90 minutos de la Abadía de Westminster saldrán este mes y las fuentes consultadas por el tabloide confirman que los Sussex estarán dentro de la lista de dos mil invitados donde aparecen integrantes de la realeza, dignatarios y líderes mundiales.
Un funcionario involucrado en el plan para la coronación le dijo al diario: "Definitivamente serán invitados, y estamos trabajando y asumiendo que vendrán".
Como Meghan y Harry no forman parte de la realeza activa, no está claro aún qué papel jugarían en esta festividad como, por ejemplo, si podrán estar en el balcón de Buckingham.
Los ideólogos de la coronación tienen la esperanza de que los duques de Sussex lleguen al Reino Unido antes del fin de semana oficial y así evitar encuentros incómodos que distraigan la atención del día histórico. La fuente agregó: "Sería útil si llegaran antes para que no sea un circo total en el día".
El fin de semana festivo especial contará con una serie de procesiones y la aparición del Rey en el balcón del Palacio dos veces. Después del servicio, Carlos III y la reina consorte recién coronados participarán en un gran desfile conocido como la Procesión de la Coronación.