El Príncipe William fue el primero en hablar de que sería "una velada tensa" con su esposa, Kate Middleton. Se refería al resultado del partido de rugby entre Gales e Inglaterra que podría haber generado un enfrentamiento matrimonial: el futuro Rey es el patrocinador del equipo galés de los Dragones y la princesa de Gales lo es del inglés a quien llaman el "quince de la rosa".
Los príncipes de Gales siguieron la parodia al pie de la letra y, al mismo tiempo, generaron un ambiente de ironía permanente acerca de los rumores que han surgido sobre una crisis y eventual quiebre en su matrimonio.
Kate y William estuvieron en el estadio Millenium de Cardiff para presenciar el triunfo de Inglaterra sobre Gales, por 20-10. Es decir, ganó el equipo de la princesa.
En una reunión previa al partido, con jugadores lesionados que reciben apoyo de la organización Welsh Rugby Charitable Trust, el Príncipe William dijo que "una victoria de Inglaterra significaría un desastre para nuestra familia".
William es patrocinador histórico de la Unión de Rugby de Gales, mientras que Kate es la "madrina" de la Unión de Rugby de Inglaterra, puesto que heredó al quedar vacante tras la abdicación del Príncipe Harry.
"Va a ser un viaje de regreso a casa muy tenso. Si ganamos hoy, mi esposa no me hablará. Será una noche tensa", decía el futuro Rey.
Kate intervino, aunque con menos picardía que su esposo: "El ambiente siempre es insuperable, así que estoy deseando que llegue". Y luego contó que su hijo George está empezando a jugar rugby, y lo hace en la modalidad tradicional, no con el juego didáctico sin contacto.
La pareja, además, vio el gracioso momento en que al jugador inglés Freddie Steward se le cayeron los pantalones y quedó desnudo ante el estadio lleno y la gran audiencia televisiva.