La reconocida cantante Cher (76) tuvo dos hijos, Chaz Bono (53) quien es fruto de su relación con el músico Sonny Bono, y Elijah Allman (46), hijo del cantante Gregg Allman. La intérprete y sus retoños están enfrentados debido a que ellos se rehúsan a que su madre se case con el productor Alexander Edwards (36).
La compositora de Believe está dispuesta a dejar toda su herencia a nombre de su prometido debido a que sus hijos no apoyan su compromiso, pero la verdad es que Cher nunca ha tenido una relación perfecta con ellos. De hecho los ánimos al interior de la familia suelen estar tensos.
Si bien Chaz y Elijah compartieron un fuerte vínculo durante su infancia, poco a poco se fueron separando, principalmente porque ambos tenían sus propios asuntos con los que lidiar. Chaz nació como Chastity Sun Bono y desde muy joven comenzó su lucha para ser reconocido como hombre transgénero. El hijo mayor de Cher ha conseguido papeles como actor en series como 'American Horror Story' y es reconocido por su papel activo dentro de la comunidad LGBTQ.
Por otro lado, Elijah tuvo una tormentosa infancia ya que Cher lo envió a un internado cuando tenía ocho años para mantenerlo alejado de su padre, quien consumía drogas en exceso. Lejos de su hogar, el joven moldeó su carácter y cuando volvió a casa le fue difícil integrarse a la familia. Siguiendo el camino de sus padres el joven comenzó una carrera en la música como guitarrista, donde ha colaborado con varias bandas. El hijo menor de Cher desafió su autoridad en 2013 cuando se fugó para casarse a pesar de la desaprobación de la artista.
En conversación con Closer Weekly, la cantante contó que le tomó bastante tiempo arreglar su relación con sus hijos, además aseguró que Chaz y Elijah han sido siempre “los mejores hijos”. Pero sus peleas del pasado vuelven a salir a flote ahora que Cher amenaza con dejar a sus hijos sin su herencia.