La reina Letizia (50) lleva varios años como una de las monarcas con más estilo y glamour gracias a que ha mantenido un aspecto sorprendentemente juvenil. Mucho se ha rumoreado sobre algunas intervenciones estéticas que no han sido confirmadas por ella ni por la Casa Real. Sin embargo, son evidentes a simple vista.
Las especulaciones con respecto a ciertos arreglos en su rostro la han perseguido durante años. Solo hay que echarle un vistazo a su apariencia anterior para confirmar que, efectivamente, su rostro sí ha cambiado.
Expertos en la materia aseguraron que la periodista posee varios retoques estéticos a los que se habría sometido en los dos últimos años para frenar los signos del envejecimiento.
El especialista en medicina estética y regenerativa del Centro Médico Teknon de Barcelona, Gonzalo Wiersba, comentó a la revista Más y Más que la esposa del rey Felipe VI (55) se habría realizado una elevación de cola de ceja para elevar la mirada, bótox para eliminar arrugas en frente y ojos, ácido hialurónico en pómulos y ojeras, lipolifting de ojeras, que consiste en infiltrar la grasa del propio paciente, y perfilado de labios para hacerlos más carnosos. Además de una cirugía de nariz, reconocida por la misma Letizia.
“Es evidente que se ha hecho algunos retoques que aportan pinceladas a su elegancia”, expuso el especialista. Todos los expertos coinciden en que la transformación en el rostro de la reina ha sido “sutil y progresiva” desde que se conoció como Letizia Ortiz Rocasolano, la presentadora del Telediario de TVE y prometida con el entonces príncipe Felipe, hasta la actualidad.