Antes de convertirse en la flamante princesa de Gales, Kate Middleton (41) fue la duquesa de Cambridge tras casarse con el príncipe William (40). Sin embargo ese título estuvo a punto de caer en Sophie Wessex (58), la esposa del príncipe Eduardo (58), pero por un curioso motivo la historia fue distinta.
El hijo menor de la reina Isabel II se casó con Sophie en 1999, y desde entonces ella se ha convertido en una de las figuras secundarias más importantes de la realeza y fue muy cercana a la difunta monarca. A diferencia de su hermano mayor, el príncipe Eduardo no recibió un ducado en su boda y por el contrario se convirtió en conde de Wessex.
Según informó un cortesano del palacio, originalmente se le ofreció el título de duque de Cambridge al hermano menor del rey Carlos III, pero él prefirió otro título. “El príncipe Eduardo iba a ser el duque de Cambridge, pero vio la película Shakespeare in Love, que tenía un personaje llamado el conde de Wessex. Le gustó cómo sonaba y le preguntó a la Reina si podía tener eso en su lugar”, comentaron.
La nuera consentida de la reina Isabel II goza de una gran popularidad entre los miembros de la monarquía, incluso la ex monarca le recomendó a Meghan Markle que siguiera sus pasos porque tenían perfiles similares. A pesar de que Sophie Wessex y su esposo no son duques, aún podrían serlo tras la llegada del rey Carlos III al trono.
Fuentes cercanas a la realeza aseguran que es muy probable que el príncipe Eduardo sea nombrado duque de Edimburgo, título que ostentó su padre hasta el día de su muerte. Por lo que Sophie Wessex podría tener el mismo cargo que ocupó la reina Isabel II desde su boda en 1947 hasta su acceso al trono en 1952.