Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes, mundialmente conocido como “Cantinflas”, es una de las figuras más emblemáticas del cine mexicano. A pesar de su éxito y reconocimiento, detrás del humor y la fama, albergaba un peculiar deseo: encontrarse con una sirena.
Su amor por el mar, especialmente por las playas de Acapulco, alimentaba esta curiosa aspiración.
El encuentro con un desconocido
Según las leyendas urbanas, en una ocasión, Cantinflas conoció a un enigmático individuo llamado Carlos Lorenzo Hernández en un bar de la Ciudad de México. Durante su conversación, el actor confesó su anhelo de ver a una sirena. En lugar de descartar este deseo como una simple fantasía, Hernández cuestionó a Cantinflas sobre sus verdaderos anhelos y lo que estaría dispuesto a hacer para cumplirlos.
Un pacto y una piedra especial
La charla tomó un giro inesperado cuando Hernández entregó a Cantinflas una piedra similar a un cuarzo, instruyéndolo a comprar una casa en Acapulco y esperar su regreso.
Tras adquirir su mansión en Acapulco, Cantinflas recibió nuevas instrucciones: debía colocar una estatua suya mirando al mar y decorar su hogar con imágenes de criaturas marinas.
El encanto de las sirenas
Según cuenta la leyenda, una noche, a las 2:00 am, Hernández reapareció, guiando a Cantinflas hacia el mar. Para asombro del actor, no solo vio a una, sino a varias sirenas.
Desde ese momento, se dice que Cantinflas organizaba grandiosas fiestas en su mansión, con las sirenas como invitadas estelares. Algunos relatos incluso sugieren que, hasta el día de hoy, es posible presenciar la aparición de estas criaturas en la residencia del actor, siempre a eso de las 2 de la mañana.
La mansión en la actualidad
Según señalan algunos medios locales, tras la muerte de Cantinflas en 1993, la mansión pasó como herencia a su hijo, más un sobrino quiso pelear parte del patrimonio que habría dejado Mario Moreno, lo que se tradujo en una batalla legal por las posesiones del actor, lo que incluye el terreno de Acapulco. La mansión fue acumulando deudas y poco a poco se fue deteriorando, desmotivando a posibles compradores para la propiedad.
Sin embargo, se ha convertido en una suerte de atracción para creadores de contenidos en redes sociales. Y es que claro, las ruinas de la mansión, unidas a la leyenda urbana, tienen su encanto.
Leyendas y realidades
Aunque esta historia mezcla elementos de la realidad con la fantasía, refleja la rica tradición de leyendas y mitos que rodean a las figuras icónicas del cine y que sólo enriquecen a la mundialmente conocida cultura mexicana.
¿Hasta qué punto la fama y el deseo pueden llevar a alguien a cruzar los límites de lo imaginable?