Este lunes, durante los servicios funerales de la reina Isabel II, el rey Carlos III (73) tuvo un detalle muy especial con su amada madre. El hijo mayor de la monarca mandó a colocar sobre el ataúd flores que tienen un profundo y sentimental significado.
La familia real comunicó por medio de su cuenta de Twitter que el nuevo rey solicitó que la corona tuviera las mismas flores del ramo de bodas que portó durante su boda con el príncipe Felipe de Edimburgo.
"A pedido del Rey, la corona contiene follaje de romero, roble inglés y mirto (cortado de una planta cultivada de mirto en el ramo de bodas de la reina) y flores, en tonos dorados, rosados y burdeos profundo, con toques de blanco, cortado de los jardines de Royal Residences", decía el comunicado en redes sociales.
La corona de la monarca, el orbe y el cetro, se colocaron sobre el ataúd en su camino desde Westminster Hall hasta la abadía de Westminster, donde yacía en el centro de la capilla.
El rey Carlos también colocó una nota en el féretro que decía: "En memoria amorosa y devota. Carlos R.", y como dato curioso, una araña fue captada en la tarjeta que estaba encima del ataúd, así lo reportaron usuarios de redes sociales.