Salma Hayek (56) es considerada una de las mejores actrices de México en Hollywood, pues ha obtenido gran reconocimiento a nivel mundial, tanto que le ha valido algunas nominaciones a importantes premiaciones del cine como lo es el Oscar a mejor actriz principal o de reparto por su interpretación de la pintora mexicana Frida Kahlo.
Sin embargo, se habla mucho de su gran talento en la pantalla grande y poco sobre su vida privada, puesto que es muy reservada de lo que sucede en su círculo familiar, pero recientemente ofreció una entrevista donde confesó que por un tiempo pensó seriamente en dejar de lado la actuación para cumplir uno de sus más grandes sueños, ser madre.
“Mi caso fue muy particular porque yo me volví madre muy tarde. Lo hice ya que encontré a la pareja de mi vida, que tenía una carrera estable, pero es que yo ya tenía tantas ganas de tener a esta hija, que ya nada más me importaba”, manifestó la actriz para Vogue.
No obstante, una conversación con su pareja, François-Henri Pinault (60), cambió su visión al respecto, pues el famoso empresario le señaló que en el futuro podría llegar a extrañar su profesión y que por esa razón era mejor que no la abandonara por completo.
“François me ayudó mucho porque estaba dispuesta a no trabajar más, pero cuando Valentina tenía poco más de un año, me dijo que tenía que regresar a trabajar porque en algún punto podría extrañar mi profesión, porque además es una que celebra porque permite darle rienda suelta a mi creatividad y porque soy artista”, comentó Salma.
Las palabras de su esposo hicieron que la protagonista de Bandidas no dejara de lado su talento y los sueños que la faltaban por cumplir dentro del mundo del entretenimiento, ya que en el futuro podría sentirse un poco insatisfecha con ella misma, por lo que a los tres años de haber nacido su hija, Valentina Paloma Pinault (14), volvió a las pantallas.