La Reina Isabel II se había quejado por el excesivo gasto que genera el helicóptero del Príncipe William, que pilotea él mismo. Ahora, la soberana está extremadamente preocupada porque su nieto vuela regularmente junto con su familia, algo que los protocolos reales prohíben.
William es el segundo en la línea de sucesión al trono detrás de su padre, el príncipe Carlos. El príncipe George, hijo del duque de Cambridge, es el tercero.
Según informa "Daily Mail", la Reina Isabel II ha instado a William a que deje de volar helicópteros junto con su esposa, Kate Middleton, y sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, a bordo. Según describe la publicación, la monarca está "aterrorizada" de que un desastre pueda ocurrir, especialmente cuando viajan en condiciones de mal tiempo.
El monarca teme que un accidente pueda amenazar la línea de sucesión y que esto, a la vez, genere una crisis constitucional.
De acuerdo con las reglas no oficiales, los miembros de la realeza senior no pueden volar juntos, pero las regulaciones se relajaron desde que nacieron los hijos de William, quien es piloto de la Royal Air Force. La razón fue que viajar les permitía pasar más tiempo juntos.
"The Sun", citando una fuente cercana a la monarca, había informado a principios de este año que "los vuelos de William mantienen a la Reina despierta por las noches y está muy preocupada. Ella sabe que William es un piloto capaz, pero no cree que valga la pena el riesgo de que los cinco sigan volando juntos y no puede imaginar lo que sucedería. Provocaría una crisis constitucional".
Las preocupaciones de la Reina Isabel II vuelven a aparecer después de que el Príncipe William voló un helicóptero con su hija Charlotte como copilota, en un viaje durante los Juegos de la Commonwealth.