Un adelanto de un nuevo documental sobre la muerte de Michael Jackson, revela que el cantante fallecido en 2009 utilizó 19 identificaciones fraudulentas para comprar sustancias médicas. Según la investigación, el cantante habría estado consumiendo Propofol en grandes cantidades.
NY Post accedió al adelanto que muestra al detective Orlando Martínez restando responsabilidad al doctor Conrad Murray, quien estuvo en prisión tras la muerte del cantante. “Las circunstancias habían conducido a su muerte durante años y todos estos diferentes médicos le habían permitido a Michael dictar sus propios términos”, dijo el policía.
Martínez agrega que el cantante tuvo ayuda médica para “obtener los medicamentos que quería, cuándo los quería y dónde los quería”, dijo antes de agregar que “todos ellos son la razón por la que está muerto hoy”.
La investigación apunta al fallecido dermatólogo Arnold Klein, quien proveyó de drogas al cantante. Debbie Rowe, ex esposa del artista, afirma que Klein era conocido por hacer cosas alejadas de la ética y que, “escribía recetas para cosas que no tenían nada que ver con lo que estábamos tratando”.
Según Ed Winter, forense adjunto del condado de Los Ángeles, Jackson creó 19 alias falsos para recolectar diferentes medicamentos. El dermatólogo, asegura, habría llevado registros de aquellas identidades para saber a qué identidad iba cada medicamento.
El Dr. Harry Glassman, cirujano plástico del intérprete de "Rock with you", explicó el modus operandi: “La forma en que Michael consiguió todos estos medicamentos fue buscando doctores. Tenía varios médicos diferentes con los que estaba involucrado y acudía al “Doctor A” y pedía un sedante y luego iba al Doctor B” y podría pedir el mismo”.
“Michael es responsable, en gran medida, de su propia muerte, pero ciertamente recibió mucha ayuda de la comunidad médica”, cerró Glassman en el adelanto de TMZ Investigates: Who Really Killed Michael Jackson.
Michael Jackson murió el 25 de junio de 2009 a los 50 años en Los Ángeles, tras sufrir un paro cardíaco provocado por el anestésico Propofol. Según el forense Ed Winter, Jackson habría estado consumiendo el medicamento en botellas del tamaño de una Gatorade al momento de su muerte.