La reina Isabel II llegó al trono tras la muerte de su padre, Jorge VI, cuando ella apenas tenía 25 años, desde entonces su trabajo ha sido única y exclusivamente la monarquía, por lo que no pudo terminar sus estudios, de hecho, ni siquiera tuvo la oportunidad de ir a la universidad.
Tanto Isabel como su hermana, la princesa Margarita, fueron los últimos miembros de la realeza británica en ser educados desde casa con un tutor. Según la revista de BBC, History Magazine, gran parte de la infancia de la monarca se vivió entre sus clases que duraban aproximadamente una hora y media, y el resto del día era dedicado a juegos en el exterior, bailar y clases de canto.
La reina tuvo como tutor al preboste de Eton College Henry Marten para impartir clases de historia constitucional, y algo curioso de la abuela de William y Harry es que habla francés fluido. Además de lo escolar, la joven princesa se unió al Servicio Auxiliar Territorial durante la segunda guerra mundial, donde aprendió de vehículos motorizados en el Vehicle Maintenance Course.
La reina Isabel II únicamente alcanzó a cursar la primaria. Sus limitaciones académicas se debieron a varios conflictos bélicos de la época y a decisiones familiares que, hasta el momento, son todo un misterio. Por esa razón, los estudios en escuelas tradicionales no eran una prioridad.
Isabel se encontraba en la línea de sucesión para convertirse en reina, a partir de la mayoría de edad ya se estaba preparando para ser la Jefa de Estado, así que recibió tutoría de su propio padre, el rey Jorge VI. Las encargadas de enseñarle las labores cotidianas como la etiqueta y el buen comportamiento de la realeza, fueron su madre y su abuela. Una vez fue coronada, la reina Isabel continuó aprendiendo idiomas.
A principios de este mes de junio, Elizabeth Alexandra Mary, nombre real de la reina Isabel II, alcanzó los 70 años como como soberana, convirtiéndose en la monarca más longeva de Europa, esto por el tiempo en el trono y su edad.