Megan Fox y su prometido, el músico Machine Gun Kelly, han hecho públicos sus rituales relacionados con la sangre. Ambos "se han permitido" unas "pocas gotas de sangre" de vez en cuando, intercambiando muestras como parte de un ritual. La pareja no se ha autocalificado públicamente como vampiros, pero los sacerdotes católicos están atentos.
El religioso argentino Federico Highton ha dado una grave advertencia para la pareja: “El vampirismo es algo que debe ser abordado por un exorcista”.
El reverendo sudamericano no es el único. Taylor Marshall, un youtuber religioso, publicó un video sobre la situación y estaba claramente disgustado cuando intervino. “Fox dice que bebe sangre humana. Pero luego ella califica 'es solo para propósitos rituales', ¿como si eso lo hiciera mejor?", dijo.
"Quiero decir, si ella dice: 'Bebo sangre porque ayuda a mi piel', sería como si fuera enfermizo y repugnante. Eso es asqueroso, malvado. Beber sangre humana es un pecado, sin importar cómo alguien lo justifique", agregó.
"Cuando lo dice solo con fines rituales, eso es satánico, oculto, malvado, Drácula, vampiro", añadió.
La pareja confirmó su compromiso en enero pasado. Kelly le propuso matrimonio bajo una higuera de Bengala, lugar donde dos años antes había pedido que sucediera algo "mágico".
El anillo de compromiso fue diseñado para generar un gran dolor en caso de que Megan llegue a quitárselo.
La sortija se compone de dos anillos separados en forma de lágrima, uno de diamantes y el otro de esmeralda, que se unen para formar un corazón con imanes.