El pasado miércoles todo estaba listo para que se llevara a cabo la función especial de la obra Caperucita ¡Qué onda con tu abuelita!; sin embargo, poco tiempo antes de iniciar la puesta, el director Carlos Ignacio salió al escenario para ofrecer disculpas y explicar que Silvia Pinal no se presentaría "porque debido a toda la emoción que tiene le ha venido un bajón de presión", dijo en ese momento.
Días atrás ya había comenzado la controversia entre los usuarios de redes sociales, quienes aseguraban que su familia la estaba explotando y no la dejaba descansar pese a su edad, 90 años, y su estado de salud. Su hijo, Luis Enrique Guzmán, hizo frente a las críticas y explicó que su madre había retomado el teatro para salir de la depresión ocasionada por estar lejos de los escenarios.
Pese a estas declaraciones, la polémica persiste y ahora ha sido un presunto trabajador de la actriz quien declaró a una revista que el productor de la obra Iván Cochegrus y su hijo Luis Enrique Guzmán la presionaron mucho la semana pasada y eso ocasionó que se sintiera mal.
De acuerdo con la fuente de la citada publicación tanto Iván como Luis Enrique hablaron con la primera actriz y le pidieron que se esforzara para verse bien el día de la función especial, lo cual "le género un tremendo estrés a doña Silvia, pues la presionaron con aprenderse bien sus diálogos y, obvio, minutos antes de salir al escenario se le subió la presión.
Finalmente el pasado domingo, Silvia Pinal pudo presentarse en la obra, aunque algunos aseguraron que había momentos en los que arrastraba las palabras y hasta se le llegaron a olvidar algunos fragmentos del guión.