Durante el rodaje de la exitosa serie de Telemundo, El señor de los cielos, Rafael Amaya, quien interpretaba a Aurelio Casillas, tuvo fuertes problemas con el alcohol y las drogas, lo que lo llevó a enfrentarse con sus compañeros de trabajo porque ya no era la persona que todos recordaban. Una de las actrices que vivieron de cerca lo que pasó con el actor fue Fernanda Castillo, que a lo largo de cinco años sufrió lo que le sucedía a su amigo.
"Yo a Rafa lo quiero mucho y la verdad fue complicado porque yo quería que estuviera bien y yo pude ver cómo la carga de trabajo y todo lo que había alrededor del personaje, siento que lo fue afectando", mencionó Fernanda en una entrevista con Yordi Rosado en la que explicó el difícil momento que pasaron al ver las situaciones que enfrentaba Rafael, incluso recalcó que hubo un cambió drástico en él desde el día uno del rodaje hasta que las adicciones lo atraparon por completo.
"Yo lo he querido siempre, mucho. Cuando El señor de los cielos empezó era el primero que llegaba, se sabía sus textos y estaba a full, siento que el problema que tuvo se lo fue comiendo", relató. Castillo manifestó que no sabía cómo ayudarlo. "Yo no encontraba ya en sus ojos como al amigo y al cómplice en escena que tuve durante muchos años, trabajé cinco años pegada a Rafa", dijo.
La protagonista de Dulce Familia recalcó que es una persona a quien quiere mucho y "le dolió ver que su amigo no estaba bien". "Era mi amigo, era alguien a quien quiero. Los dos veníamos de Hermosillo, entonces teníamos muchas cosas en común y yo sé que él me quiere mucho también y pues me dolió ver que mi amigo no estaba bien".
En una entrevista, Rafael Amaya explicó que fue él quien se involucró con personas inadecuadas después de hacer una investigación que lo llevó a tratar con narcotraficantes mexicanos; todo esto y la inesperada fama, que no supo manejar según contó, lo orilló a refugiarse en las adicciones que gracias a un tratamiento ya logró dejarlas y está listo para seguir con su camino en el mundo de la actuación.