Desde que su delicada pero potente figura apareció en la serie Gambito de Dama (Netflix) encarnando a la talentosa jugadora de ajedrez "Beth Harmon", la actriz y modelo nacida en Miami, pero con raíces británicas, Anya Taylor-Joy se encumbró en lo más alto del estrellato del cine y la televisión.
Ganadora por ese papel de un Globo de Oro, un Sag y un Critics' Choice Awards, su rostro se hizo frecuente en los eventos de moda y en las alfombras rojas. Ni hablar de sus seguidores, que desde que comenzó a mover las piezas en el tablero se multiplicaron progresivamente.
Pese a toda la fama circundante, la actriz aún no se acostumbra. En la entrevista que le concedió a la revista Vogue inglesa (ver video de la promoción), Taylor-Joy señala que sigue siendo la alfombra roja un lugar en la que se siente intimidada por los gritos, por lo que ha debido adoptar posiciones más defensivas ante la inquisición periodística. "Yo, como, me desmayo cuando estoy en una alfombre roja. Es tan, tan abrumador... Pero he notado que recientemente, cuando piso una alfombra, que los fotógrafos y periodistas dicen, 'Está bien, obtenemos más de ella si estamos más tranquilos', porque yo simplemente no respondo a la agresión. Me cierro".
A los bien vividos 25 años, la actriz que creció entre Buenos Aires y Londres, y que tuvo un debut fulgurante en la película de terror "La Bruja" (2015), la portada de Vogue le representó todo un orgullo. "Mira mamá, la portada de British Vogue!! Qué sueño hecho realidad. Una experiencia tan valorada", escribió en su cuenta de Instagram.
La entrevista y los artículos y fotografías de la actriz luciendo elegantes diseños saldrán este 29 de marzo a la venta, preámbulo de su próximo rol en el cine: "The Northman", una epopeya ambientada en la Islandia del siglo X, donde nos encontraremos con una Anya Taylor-Joy esclavizada, empapada y apenas vestida con unos harapos. Una buena prueba de carácter, para una actriz de carácter.