Las alarmas en la monarquía vuelven a prenderse tras darse a conocer que la reina Isabel II canceló su participación en el servicio del Commonwealth en la Abadía de Westminster que tendrá lugar este lunes.
A través de un comunicado oficial, se ha informado que la jerarca no podrá asistir y en su representación estará su hijo, el príncipe de Gales, aunque no han detallado los motivos por los cuales no realizará este acto.
“Después de discutir la organización con la Royal Household, la Reina ha pedido al Príncipe de Gales que represente a Su Majestad en el servicio del Commonwealth en la Abadía de Westminster el lunes. La Reina continuará con otros compromisos planeados, incluyendo audiencias en persona, la próxima semana.
“Como estaba planeado, al servicio asistirán el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornwall, los Duques de Cambridge, y la Princesa Alexandra. Los Duques de Gloucester no asistirán, tras el positivo a Covid del Duque de Gloucester. El mensaje del Día del Commonwealth de la Reina se distribuirá de la manera usual”.
Los problemas de salud de la reina parecen acrecentarse, y puede deberse a su avanzada edad (95 años) desde noviembre pasado se dio a conocer que por indicaciones médicas debía tomar una semana de descanso.
Este año dio positivo a Covid-19 y tras una recuperación con extremos cuidados, recibió a Justin Trudeau, mandatario de Canadá, en el Castillo de Windsor, lo cual hacía pensar que retomaría su agenda y todos sus compromisos públicos. Este año se alista también la celebración de su Jubileo Platino por 70 años de su ascenso al trono.
De acuerdo con la periodista Rebeca English, editora del Daily Mail, esta cancelación no disipan las preocupaciones sobre la salud de la monarca.
“Entiendo que se trata de una cuestión de 'comodidad', tanto de viajar a la Abadía de Westminster como de pasar una hora en el servicio, no de enfermedad. Pero hará poco para disipar las preocupaciones sobre la salud general de Su Majestad”.