La madre de Meghan Markle habló por primera vez sobre su permanente apoyo a los duques de Sussex cuando asumió un papel protagónico en la vida de estos. Las declaraciones las dio en la serie de Netflix "Harry & Meghan" que se estrenó este jueves.
Doria Ragland , de 66 años, vive en Los Ángeles y ha mantenido una estrecha relación con la pareja y sus nietos. La abuela de Archie y Lilibet aparece en los tres primeros episodios del documental.
Las fotos familiares muestran a Dora en la celebración de hitos clave, incluido el primer cumpleaños de Archie. En el segundo capítulo, Doria dice que está lista para que su voz se escuche y revela cómo se sintió cuando el mundo supo por primera vez que su hija estaba saliendo con un príncipe.
"Le quería compartir un poco de mi experiencia como su madre, con una crianza dentro de una red de mujeres", explicó.
Para ser su primera vez ante las cámaras, Doria habló con libertad acerca de la relación con su hija y dejó en claro el rol clave de apoyo que tiene con la pareja.
Confidenció que instantáneamente supo que el Príncipe Harry era "el indicado'" para su hija desde la primera vez que lo vio.
Harry era el indicado
Al recordar su conversación telefónica, Doria dice que Meghan, quien en ese momento actuaba en el papel de Rachel Zane en "Suits", le susurró: "Mami, voy a salir con el príncipe Harry".
Doria dijo: "Empecé a susurrar y dije: '¡Dios mío!'". Luego, Meghan le dijo que necesitaba mantener la relación en secreto. "Desde el principio, fue como... nadie podía saberlo", explicó.
Recuerda bien la primera vez que estuvo con Harry: "Él era este hombre guapo alto con cabello rojo. Tenía buenos modales, era realmente agradable. Se veían muy felices juntos. Ahí dije: 'El es el indicado'".