Los tráilers de promoción de "Harry & Meghan" se han visto enfrentados a un ejercicio de fact checking generalizado que permita verificar la autenticidad de las imágenes que muestran. Al menos cuatro de ellas están fuera de contexto o fueron editadas, lo que ha permitido a los medios del Reino Unido hablar acerca del deseo de engañar al público de parte de los Sussex.
La escena más controvertida es la del último tráiler, lanzado este lunes, en donde se ve un acoso mediático que no es precisamente de alguna actividad de Harry y Meghan. Se trata de la visita de Katie Price a la corte, donde fue "perseguida" por los medios.
Otra de las imágenes da la impresión de que un reportero gráfico está parapetado buscando imágenes exclusivas de Meghan con Archie. Pero era la visita de los Sussex al arzobispo Desmond Tutu en Sudáfrica. Y el fotógrafo estaba acreditado.
Luego, hay imágenes de cámaras alrededor de una limusina antes de que el tráiler corte a Meghan llorosa. El pasajero del vehículo era en realidad Michael Cohen, el ex abogado de Donald Trump, quien terminó en la cárcel.
En el primer tráiler hay un ejército de fotógrafos a la espera de alguien. Eran los acreditados para el estreno de una película de Harry Potter, algo que ocurrió varios años antes de que Meghan y Harry se conocieran.
El segundo teaser publicado el lunes muestra a Harry acusando a su familia de "filtrar" y "plantar" historias en los medios. También advierte a los miembros de la realeza: "Nadie sabe toda la verdad. Sabemos toda la verdad".
Ingrid Seward, editora jefe de la revista Majesty, dijo: "Las fotografías inexactas socavan la validez de lo que Harry y Meghan están tratando de decir. Los convierte en objeto de burla". Y agregó que "si vas a criticar a la monarquía tienes que asegurarte de que todo lo que dices o haces es absolutamente correcto".