El 25 de diciembre de 1990 se estrenó en los cines Mi pobre angelito, la película que cuenta la historia de un niño de 8 años que es olvidado por sus padres y debe cuidar su casa de unos torpes ladrones. Con una recaudación de 476,7 millones de dólares motivó una secuela, lo que causó que sus actores fueran mundialmente conocidos y sus vidas nunca más fueran las mismas por la fama.
Hasta ese entonces, Macaulay Culkin (42) era un niño de 10 años, pero su interpretación del travieso Kevin McCallister llamó la atención de los cineastas, quienes no dudaron en darle más papeles de protagonista. Antes de cumplir los 15 años, el actor ya había protagonizado más de 10 películas, lo que lo motivó a tomar el primer paso para emanciparse y dejó de estar bajo la tutela legal de sus padres.
Además de formar pareja con actrices como Rachel Miner y Mila Kunis, Culkin comenzó a aparecer en los medios luego de ser sorprendido con drogas, lo que generó rumores de que estaba pasando por problemas de adicción. Después de varios años alejado de la industria, volvió a generar noticia cuando tuvo una relación con la ex chica Disney Brenda Song, con quien tuvo un hijo el año pasado.
Catherine O'Hara (68) fue la encargada de darle vida a la madre del pequeño Kevin. La actriz ya era un rostro conocido antes de participar en la película y, posteriormente, siguió teniendo una gran presencia en Hollywood. Sus roles más recientes los tuvo en televisión, lo que le valió para acreditarse un premio Emmy a la mejor actriz principal por su papel en la serie Schitt 's Creek (2015-2020).
El papel del padre de la familia McCallister estuvo a cargo del actor John Heard, quien tuvo una vida marcada por las polémicas luego de participar en la película. Fue declarado culpable de allanamiento de morada en la casa de su ex, acusado de asalto en tercer grado. Varios años después rehizo su vida, se casó y tuvo dos hijos, pero quedó devastado cuando su hijo Max murió en 2017. Solo seis meses después el actor fue encontrado muerto en la habitación de un hotel, a los 71 años.
Uno de los ladrones fue interpretado por el actor Joe Pesci (79), quien es reconocido por sus papeles en películas de mafiosos y que solo meses antes había coprotagonizado Goodfellas (Los buenos muchachos). Su aparición en Mi pobre angelito lo sacó de su zona de confort y lo llevó a los filmes de humor, pero volvería a sus raíces con el estreno de Casino (1995). El intérprete se mantuvo alejado de la industria durante varios años hasta regresar de la mano del director Martin Scorsese en 2019 con El Irlandés.
Daniel Stern (65) fue el otro ladrón en la película. Hasta ese momento ya había tenido apariciones en el cine, pero su papel en la película navideña lo ayudó a conseguir trabajos en televisión. A pesar de que el intérprete sigue teniendo apariciones en TV, nunca más tuvo el protagonismo que consiguió en Mi pobre angelito.