La socialité Tamara Falcó (40) recientemente tuvo que cancelar su boda solo días después de haber anunciado su compromiso, ya que comenzaron a rondar video de su prometido Íñigo Onieva besandose con otra chica en un festival. A pesar de que que la hija de Isabel Preysler se sentía muy enamorada, aseguró que se encomendó a la virgen de Medjugorje para saber si él era el amor de su vida.
En conversación con el programa El Hormiguero, Tamara habló sobre cómo vivió el momento de su ruptura. La hermana de Enrique Iglesias se encontraba de fiesta cuando comenzaron a circular las grabaciones de su ex novio con otra mujer, y a pesar de que Íñigo negaba las acusaciones de infidelidad, asegurando que los videos corresponden al año 2019, se supo la verdad.
Si bien, fue un momento difícil, la marquesa de Griñón se siente aliviada ya que hace solo un par de meses peregrinó a Medjugorje a conocer a la virgen del lugar. Motivada por su historial familiar Tamara pidió: “Si no es el hombre para mí, por favor quitádmelo”.
Tamara Falcó dudaba de Íñigo Onieva
A pesar de que ahora la socialité se toma su ruptura con humor, cuenta que los primeros días se refugió en su familia y amigos, ya que la infidelidad de su entonces novio se convirtió en un gran escándalo mediático. En el programa de Antena 3, Tamara se refirió a la petición que le hizo a la virgen, “lo que no sabía era que los planes de la Virgen eran quitármelo en televisión nacional”, comentó.
En el show se le preguntó a Tamara Falcó qué fue lo que más le molestó, si el video de la infidelidad o la mentira, pero ella comentó que eran cosas que iban de la mano. “La relación tenía que ser basada en la confianza, sin embargo cuando rompes esa confianza es como un espejo al que le has dado un martillazo”, aseguró.