Amber Heard (36) reside desde hace varias semanas en Costitx, un pequeño pueblo ubicado al interior de Mallorca, España, donde pretende hacer un reinicio de su vida luego de perder el juicio por difamación contra Johnny Depp (59). En ese lugar tomó una nueva identidad para pasar inadvertida y convertirse en parte de la comunidad.
Según el Diario de Mallorca, la actriz de La Liga de la Justicia (2017) llegó hace poco más de dos meses al lugar que cuenta con una población de 1.300 habitantes. Para intentar pasar inadvertida, Heard recurrió a cambiar su identidad. Hoy se hace llamar Martha Jane Cannary y vive tranquila junto a su hija Oonagh Paige (1) y su pareja, la fotógrafa de cine Bianca Butti (41).
El nombre escogido por la ex del protagonista de Piratas del Caribe (2003) no es al azar. Se trata del nombre compuesto y el primer apellido de un personaje histórico estadounidense del siglo XIX, que se hacía llamar por su sobrenombre Calamity Jane. La mujer fue una heroína, exploradora y activa luchadora en contra de los indios aborígenes americanos.
Amber Herad colgó un letrero fuera de su nuevo domicilio con su reciente apelativo que, según explica Mirror, tendría directa relación con las raíces de Johnny Depp, quien dice tener sus orígenes familiares en antiguas tribus de nativos americanos y que su tatarabuela era una cherokee.
Algunos de los nuevos vecinos de la protagonista de Aquaman (2018), compartieron con El País su experiencia viviendo en el mismo barrio que Heard. “La he tenido al lado un par de veces, pero no sabía quién era hasta que me lo dijeron. Va muy normalita por la calle y no se esconde en ningún momento”, dijo un joven poblador al medio español.
Otro vecino revela que Heard: “Pasea con su hija y va al parque. Lleva una vida muy normal, de pueblo, como si fuera nativa”, admite quien se ha encontrado con la intérprete jugando en los columpios del lugar como cualquier persona del barrio. Según los residentes del lugar, la estrella de Hollywood tiene la intención de quedarse a vivir allí durante un tiempo.
Aunque no se conocen detalles de la residencia de la actriz, se sabe que alquiló su nueva casa en la isla del Mediterráneo durante el verano español. La morada pertenece a la familia de la ex presidenta del parlamento regional, María Antonia Munar, que fue condenada a 14 años por corrupción.