Aunque parece que todo está escrito en la historia de amor entre Tamara Falcó (40) e Íñigo Onieva (33), aún siguen surgiendo situaciones en esta relación, como el destino del flamante anillo de compromiso que la marquesa de Griñón de devolvió a su ex prometido.
A pesar de que tanto Íñigo como Tamara han empezado a hacer su vida por separado, ha trascendido que el empresario no pierde la esperanza de recuperar el amor de su ex pareja y así habría quedado en evidencia con lo que hizo con la joya con la que se le propuso.
De acuerdo con la revista ¡Hola!, Íñigo no se ha podido despedir del anillo de compromiso con el que selló su compromiso con la media hermana de Enrique Iglesias.
El empresario llevó la joya elaborada en oro blanco, con tres diamantes en corte pera engarzados, de 0,30 quilates a la prestigiosa joyería donde lo compró, pero no para regresarlo, sino para que lo custodien un tiempo, ya que guarda la esperanza de que regrese a su dueña.
"Ahora es un símbolo que conlleva muchas connotaciones negativas y él no está preparado aún para desprenderse de él", indicó una fuente a la revista española.
Según lo publicado por la mencionada publicación, Íñigo se reunió con dos empleados de la joyería para pedirles que se la "custodien temporalmente" e inesperadamente pidió que lo transformen, pues quiere hacerlo más grande, ya que para él representa los obstáculos en su relación.
De acuerdo con sus propias palabras, Onieva no pierde la esperanza de recuperar el amor de Tamara Falcó y retomar sus planes de compromiso que tenían antes de que estallara el escándalo por la infidelidad que el empresario cometió.