En la primera jornada de las festividades religiosas de Santa Devota, Jacques y Gabriella, hijos de la princesa Charlene de Mónaco, quienes estuvieron acompañados de su padre Alberto de Mónaco y su tía Carolina de Mónaco, dejaron ver lo unidos que están mientras su madre se encuentra en una clínica privada en Suiza, recuperándose tanto física como mentalmente.
En algunas imágenes que fueron capturadas durante el evento, se aprecia al pequeño Jacques abrazar a su hermana Gabriella, quien se muestra un tanto temerosa luego de que una barca arriba al puerto y se comienza a incendiar, esto como parte de una representación que se hace para dicha festividad.
El pequeño intenta tranquilizarla y más tarde la niña parece entender que se trata sólo de una representación, pues en otra fotografía aparece también a lado de su hermano, pero esta vez todo indica que está más relajada, pues ya se atreve a bajarse la mascarilla y soplar para intentar apagar el fuego.
Quien también se mostró muy amorosa con los pequeños fue su tía Carolina de Mónaco, quien desde que inició el evento estuvo pendiente de que no les faltara nada a los hijos de su hermano Alberto. Y es que desde que la princesa Charlene no está, Carolina ha sido quien lo ha acompañado a todos los actos.