Jennifer Lawrence se hizo presente en el estreno de la película Don´t look up, la cual protagoniza al lado de Leonardo DiCaprio. Por la alfombra roja la actriz desfiló portando un vestido dorado de Alexander McQueen que combinó con aretes de la marca de joyería de lujo Tiffany & Co, pero su mayor accesorio fue su pancita de embarazo, el cual ya es avanzado.
La ganadora del Oscar está en espera de su primer hijo junto al galerista Cooke Maroney, con quien se casó en 2019. Hace unos meses Jennifer asistió a una marcha a favor del aborto junto a la comediante Amy Schumer, en donde se pudo observar que su vientre había crecido bastante desde la última vez que se vio ante las cámaras.
Don´t look up o No mires arriba, como fue nombrada en español, es el filme que reúne a las estrellas más reconocidas de Hollywood como Meryl Streep, Cate Blanchett, Jonah Hill, Timothée Chalamet y Ariana Grande. El director Adam McKay es acreedor de un Oscar y la impresionante historia más el elenco llevó a los productores a estrenar esta cinta de cines y en Netflix.
El 22 de diciembre se podrá visualizar en cines mexicanos y para el 24 estará disponible en la plataforma. Recientemente se estrenó el tráiler el cual deja muchas interrogantes, pues la unión de cinco ganadores del premio de la Academia hace crecer las expectativas y más porque sólo se conoce el papel que interpretarán Leonardo DiCaprio, Jennifer Lawrence y Meryl Streep.
"Tienen sólo seis meses antes de que el asteroide haga impacto, y su misión de navegar el complicado ciclo de noticias de 24 horas y conseguir llamar la atención del público obsesionado con las redes sociales antes de que sea demasiado tarde, es más cómico de lo que imaginaron. ¿Qué hay que hacer para que el mundo gire la cabeza y decida mirar hacia arriba?", explica Netflix.
Esto con relación a la trama, la cual establece que Kate Dibiasky (Jennifer Lawrence) una estudiante de astronomía descubre, junto con su profesor Dr. Randall Mindy (Leonardo DiCaprio), que un asteroide impactará la tierra, hecho que no se vuelve relevante para las personas ni para la presidenta (Meryl Streep)