Malas noticias para la Reina Isabel II. Aparte de no poder conocer a su bisnieta Lilibeth, hija del príncipe Harry y Meghan Markle, ahora se suma la mala nueva que le dieron sus médicos de cabecera. La reina deberá dejar su pasatiempo favorito: montar a caballo.
La soberana, de 95 años, pasó una noche en el hospital la semana pasada por primera vez en ocho años, pero no fue esta la razón de la prohibición. Esta ocurrió a comienzos de septiembre, según informó The Sun, y fue cuando sufrió ciertas incomodidades físicas mientras estaba de vacaciones en Escocia. En ese momento los médicos le dijeron que no montara más a caballo, algo que, según sus cercanos, la puso muy triste.
La monarca está ansiosa por volver a subirse a su caballo, pero la orden médica fue estricta. The Sun cita a una fuente del Castillo Balmoral, la casa de vacaciones escocesa de la reina, que precisó que "le encanta montar a caballo y ha sido parte de sus hábitos de toda la vida. Ha estado muy decepcionada de no poder montar desde inicios de septiembre".
La reina debía viajar a Glasgow para participar en la cumbre Cop26, pero declinó asistir por sus problemas médicos y enviará un saludo a través de un video.