La empresaria y actriz Paris Hilton asistió este miércoles a Capitol Hill, sede del Gobierno de los Estados Unidos que alberga el Capitolio, donde se reunió con legisladores para abogar por la protección de los jóvenes en las instituciones de cuidado colectivo.
En una conferencia de prensa Hilton confesó: "Hoy vengo aquí no como París, sino como una sobreviviente".
"Durante 20 años no pude dormir por la noche, mientras los recuerdos de la violencia física, la sensación de soledad, la pérdida de años pasaban por mi mente cuando cerraba los ojos (...) Esto no fue solo insomnio. Fue un trauma", dijo.
Hilton relató algunas de sus horribles experiencias de cuando era una adolescente, "me desperté con dos hombres grandes en mi habitación", preguntándole si "quería ir por el camino fácil o por el camino difícil". La ahora celebridad, pensó que la estaban secuestrando, pero literalmente la sacaron su casa y la enviaron a un centro de atención residencial, lo que ella llamó "la industria de los adolescentes en problemas".
"Me enviaron a cuatro instalaciones durante un período de dos años, y mi experiencia en cada una de ellas me persigue hasta el día de hoy", dijo, y agregó que fue estrangulada, abofeteada y sujeta a otras formas de abuso. También confesó que la obligaron a tomar medicamentos sin un diagnóstico y la encerraron, dejándola completamente aislada.
"Todos los días en Estados Unidos los niños en las instalaciones de cuidado están siendo abusados física, sexual y emocionalmente", dijo, y culpó de ello a la "falta de transparencia y responsabilidad en todo el sistema".
Hilton participó de la conferencia de prensa junto a legisladores como el representante Ro Khanna y el senador Jeff Merkley, quienes abogan por una legislación para reformar las instalaciones en cuestión, entre ellos se planean introducir la Ley de Responsabilidad por el Cuidado Congregado, que establecería una declaración de derechos con protecciones para los niños en tales instalaciones.
Hilton escribió sobre sus experiencias en un ensayo para The Washington Post: "Asegurar que los niños, incluidos los niños en riesgo, estén a salvo del abuso institucional, la negligencia y la coerción; no es un problema republicano o demócrata, es un problema básico de derechos humanos que requiere una acción inmediata", escribió.